Zona Norte en Producción visitó las instalaciones de esta cooperativa que quiere continuar su crecimiento a partir de un emprendimiento que comenzó en el año 2010, pero que tuvo mayor impulso con la llegada del intendente Ariel Sujarchuk, quien a instancias de un proyecto presentado por los socios, les cedió un terreno de casi dos hectáreas para desarrollar la actividad apícola, teniendo como objetivo el agregado de valor a sus producciones de miel y polen.
La Cooperativa Apícola Amuyen nació en el año 2004 por iniciativa de un grupo de 10 productores de la zona de Escobar. En un primer momento conformaron un grupo de Cambio Rural, “Panamericano I”, perteneciente al INTA Delta del Paraná. Un tiempo después armaron un nuevo grupo Cambio Rural al que llamaron Amuyen que en lengua mapuche significa “emprendamos el camino todos juntos”.
En esta etapa de fortalecimiento organizacional surgieron nuevos proyectos conjuntos que se orientaron a la producción de miel y polen en la zona de humedales. Actualmente la cooperativa está conformada por 22 productores apícolas, de los cuales el 20% tiene a la apicultura como su principal fuente de ingreso y poseen en promedio 100 colmenas cada uno. En el año 2010 Amuyen se integró a la Federación de Cooperativas Apícolas “FECOAPI”, organización conformada por 10 cooperativas apícolas localizadas en el corredor de la Ruta 9.
La novedad es que a fines del mes de mayo pondrá en funcionamiento una nueva planta de fraccionamiento de miel. A partir del trabajo conjunto con los técnicos de INTA Campana, la cooperativa obtuvo financiamiento para la adquisición de la planta por medio de la presentación de un proyecto al programa Entramados Productivos del Ministerio de Trabajo de Nación.
Desde un comienzo, uno de los principales objetivos que se planteó la cooperativa fue el agregado de valor a sus producciones de miel y polen. Para lograrlo era necesario contar con una sala de fraccionamiento de miel y una sala de procesamiento de polen que una vez habilitadas les permitirá iniciar los trámites de RNE y RPPA necesarios para la comercialización.
Con estos objetivos la cooperativa junto con los técnicos de INTA Campana, Maribel Carrasco y Sebastián Coll, iniciaron la búsqueda de financiamiento. Uno de los primeros logros fue el apoyo recibido de la Municipalidad de Escobar quién otorgó en comodato un terreno para el funcionamiento de las plantas (Las Heras 4990). Luego, presentaron un proyecto al programa Entramados Productivos del Ministerio de Trabajo de la Nación para la obtención de una planta de fraccionado de miel. La adquisición de la planta que fue aprobada por un monto total de $1.200.000, terminó su ejecución en el mes de diciembre de 2017 y estará operativa a partir de fines de mayo. Las instalaciones están armadas en el interior de un container y cuenta con una cremadora, una homogenizadora, bombas de trasvase y la fraccionadora semi automática. “La búsqueda de financiamiento fue una de las estrategias de la INTA Campana para fortalecer a las organizaciones de productores en la generación de procesos valor agregado en el territorio“, explicó Maribel Carrasco, Agente de Proyecto de Cambio Rural.
Para la adquisición de una planta de procesamiento y fraccionado de polen se presentó un proyecto al Programa Para el Desarrollo Rural Incluyente (PRODERI) perteneciente a la Unidad para el Cambio Rural (UCAR). Con esta estrategia se logró un financiamiento de $ 2.800.000 para la planta que está armada en tres containers. En el primero se encuentran los baños y el lugar de acopio. En el segundo, está el espacio para la recepción del polen, las balanzas y el freezer. En el tercer container se realizará el secado, la limpieza y el fraccionamiento del polen. Actualmente, este proyecto se encuentra en ejecución. “Todos estos proyectos benefician a los socios de la cooperativa, a los grupos de Cambio Rural de Escobar y alrededores, y a los productores nucleados en FECOAPI. Además también benefician a apicultores que no estén agrupados en ninguna organización ya que estas salas brindarán servicios a terceros. Este equipamiento era una necesidad para la zona ya que la fraccionadora de miel más cercana se encuentra en el barrio de Barracas a más de 60 Km por lo cual se incrementan muchos los costos de producción”, explicó Angel Dovico, presidente de la cooperativa.
Finalmente, es necesario mencionar el espíritu de trabajo colectivo que forma parte de los productores apícolas. A lo largo de estos años los apicultores de la zona desplegaron distintas acciones de trabajo conjunto para potenciar sus emprendimientos y mejorar la calidad de sus productos. Es así que varios de los productores asociados a Amuyen, junto con otros productores apícolas de la conformaron otros grupos de Cambio Rural II: “Bajos del Lujan” que nuclea productores de la zona de Escobar y Zarate, y “Aguamiel del Paraná”, un grupo abocado a la producción de hidromiel y cerveza de miel, productos de alto valor agregado. Emprender el camino todos juntos, es una de las potencialidades para crecer y mejorar en el sector.
La calidad del polen del Delta
El presidente de esta cooperativa destacó en un apartado algo que muchos habitantes de la zona no conocen: el polen del delta es uno de los mejores del país: “esta zona es muy rica en polen, nosotros observamos que con esta calidad tenemos un valor agregado, que está en Escobar y de ahí que en un trabajo en conjunto con el INTA hicimos un protocolo para manejar este tema y después de seis o siete años podemos decir con orgullo que seremos de los primeros en el país que contaremos con el procesamiento interno del polen: secado, limpieza y fraccionado del mismo para luego ser acondicionado y comercializado; recordemos que este producto es un multivitamínico reconocido a nivel mundial; tengamos en cuenta que lo desarrolla la colmena para alimentar a las crías, las cuales una vez que son abejas, producen lo que conocemos como “jalea real”, de lo cual se alimenta la “reina”.
Comercialización de la miel
Al hacer referencia a este tema, Dovico expresó que “toda esta estructura estará también al servicio de la venta de la miel fraccionada, con la habilitación de los containers para tal fin, con número de registro y las exigencias sanitarias correspondientes para poder imponer el producto en supermercados, cadenas de farmacias y otros puntos de venta, con el agregado de valor en lo institucional y en la marca, con el objetivo de competir en cualquier mercado; de todos modos ya estamos en ferias y otros lugares tratando de mostrar lo que producimos, que es un producto noble, que nosotros mismos consumimos en nuestros hogares y abocados también un poco al marketing con una página web y otras ideas; el tema es que para un solo apicultor es muy caro este proyecto, por éso se forman cooperativas como la nuestra o asociaciones que pueden hacer frente a tamaña inversión.-